Similar al neo-Quijote en cuanto a parafernalia y aspecto, pero dando una vuelta de manivela mas al desequilibrio mental. Suele recoger firmas de soporte para sus campañas de resurgimiento de la orden del Temple, en la creencia de que la Iglesia de Roma va hacerle algún caso, reclamando bienes inmuebles titulos nobiliarios y otras distinciones, incluyendo las militares, sin haber hecho siquiera la mili o saber como se usa un arma de fuego. Envía cartas al Vaticano en un tono que da a entender que el Santo padre y él son socios del mismo video-club. Idiota hasta decir basta, persiste en su actitud hasta suscitar la risa de la sociedad en su conjunto.
Con algo mas de cultura que el neo-quijote (ha leído a Dan Brown) y mas ambición, ha sustituido el castillo por la página Gueb motivado por necesidades logísticas.
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