Se da continuidad a la serie de artículos sobre las sectas gnosticas, El autor, que desea permanecer en el anonimato, se manifiesta abiertamente anti-gnostico, Recordamos a nuestos lectores que las opiniones vertidas en el no pertenecen a ninguno de nuestros colaboradores, sino que ha sido recogidas de Internet; no obstante, Legión Gemina valora positivamente el trabajo de análisis realizado.
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Más allá del ítem que enuncian: "La salvación solo se puede alcanzar del conocimiento puro y verdadero", existen por detrás una serie muy interesante de pilares complejos.
Veamos como asimilan los conceptos cuasi-religiosos de su movimiento, su pensamiento. Aquí simplemente haremos una aproximación, más adelante irán surgiendo las demás conclusiones y definiciones, de los propios textos de la secta o referencias filosóficas.
Dios/Cristo (Jesucristo)
Tomando impulso de la "Nueva Era", la secta fundamenta su rechazo a Dios del resto del mundo porque si existiera sería coautor o cómplice de un universo injusto, ya que no se acomoda con el ideal de perfección que le atribuyen al Dios Verdadero. Este concepto es hábilmente manipulado según convenga mencionarlo y cómo debe ser mencionado.
Por supuesto ellos proponen una alternativa a la salvación que sólo podrán obtener quienes se adhieran al grupo, y se proclaman como la única minoría consciente de que tienen una esencia divina. Convencidos están que Dios es "La Realidad", el principio energético del Universo. Es fuente última de vida, la conciencia, la realidad. Por el conocimiento se entra en contacto con el secreto de esta "energía suprema". Ella se encuentra oculta en las grandes religiones y tienen que descubrirla los espíritus dignos.
Lo importante es descubrir el "Verdadero Yo" que es la esencia divina. Observamos que este no es el Dios personal de la Biblia que interviene en la vida de los hombres. Lo que nosotros llamamos Dios es para esta secta el "Pensamiento Cósmico" o la "Conciencia Universal", el principio vital. De allí que aspiran a convertirse en semidioses o dioses al alcanzar los niveles superiores del conocimiento, de conocerlo todo.
Dice Samael: "Cristo es una fuerza cósmica que se expresa a través de ciertos hombres, en este caso el hombre es Jesucristo de Nazaret, pero también lo hizo en el cuerpo de Buddha, y de Mahoma entre otros. Para expresarse tiene que descender de esferas superiores y penetrar en el vientre de una virgen llamada Isis, María, Cibeles, etc."
Dice la Biblia: "En esto conoced el Espíritu de Dios: Todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del Anticristo"(Epístola de San Juan 4:2-3).
Para los gnósticos Jesucristo era un "iniciado" que habría transmitido conocimientos ocultos, enseñanzas superiores y secretas y ciertas técnicas a algunos discípulos elegidos. El habría tenido contacto durante 30 años con maestros de Egipto, Siria, Monte Carmelo e India. Su caridad y la transmisión de los conocimientos de misterios sería más importante que el culto y los sacramentos que profesaba Jesucristo.
Destaquemos que la Iglesia cristiana reconoce la Santa Trinidad donde Dios es uno en "Padre, Hijo y Espíritu Santo", es decir que hablar de Jesucristo es hablar de Dios también.
Hombre
Conciben al hombre como un ser dual. Por una parte es la presencia de Dios, el hombre es belleza, amor, armonía, salud, sabiduría y poder. Por otra parte, el hombre está constituido por un cuerpo físico que es el "falso Yo", origen de todo el egoísmo, lleno de necesidades muchas veces malsanas. Ven al hombre físico como perverso por naturaleza, malo y corrompido. El hombre tiene que aprender a salir de su cuerpo. (viajes astrales). En textos de Samael, que se verán más adelante, veremos una más drástica posición, donde se nos dice que el hombre es luciferino.
Según explican, los hombres se encuentran en distintos niveles del "Ser", de menos perfecto a más perfecto. El nivel más bajo corresponde a aquellos que se dejan llevar exclusivamente por sus sentidos corporales, son "animales". El más alto es en el que se encuentra a Dios; el ideal de todo gnóstico es conseguir este nivel. Dicen poder determinar en que nivel se encuentra cada persona que se une a la secta para saber donde debe comenzar su entrenamiento. Quien se dice el gran heredero de Samael, Venerable Maestro Lakhsmi, habla respecto a Cristo el 4 de abril de 1997 en el Monasterio Lumen de Lumine :
"El Cristo ha venido en diferentes épocas utilizando para su expresión, hombres que han estado debidamente preparados, entre ellos podemos citar a: Mahoma, Fu Ji, Zeus, Moisés, Hermes, Quetzalcoalt, el mismo Jesús, Samael; estos grandes Iluminados han traído la enseñanza adecuada para la humanidad del planeta tierra".
Una simpática mezcla de mitos, dioses, hombres y profetas, sin mencionar las religiones y filosofías a las que pertenecían. Y claro está Samael divinificado como el mismo Cristo.
Muerte y reencarnación
Para los gnósticos, la muerte no existe. Lo que llamamos muerte consiste en el abandono del ego, alma, chispa divina...del cuerpo físico. Tras la muerte, quedan tres elementos constitutivos del hombre: el cadáver físico, el cuerpo vital y lo que denominan la expersonalidad. El alma o ego va a la eternidad para, pasado un tiempo, volver de nuevo a la vida física en esta tierra por medio de la reencarnación. El alma se reincorpora a un nuevo cuerpo físico.
Los gnósticos dicen recordar con todo detalle sus anteriores reencarnaciones. A lo largo de la vida y del proceso de reencarnaciones el hombre está sujeto a la "Ley del Karma", según la cual, la vida actual depende de lo que se hizo en la vida anterior, y lo que se haga influirá en la próxima reencarnación y en el número de reencarnaciones que tenga que sufrir.
De las muchas reencarnaciones y las vidas anteriores podemos (el hombre) ir superando las limitaciones. Esto se logra por el conocimiento místicos. No se trata de un conocimiento teológico, racional, filosófico o científico. La verdad está dentro de nosotros mismos, ya que "somos de esencia divina".
El propio Samael menciona varias veces en sus textos sus propias reencarnaciones en la antigua China, pero dice que una de sus preferidas fue cuando reencarnó en Julio Cesar por que pudo desenvolver "la quinta raza aria". Su "ser interior profundo" (como lo llama) también se reencarnó en el Tíbet como Lama. En este "Ser" él es un "extraterrestre". Piensa que dentro de sí estarían los principios espirituales del "Regente de Marte" y que se entrevistó con un Capitán en la Sierra de los Leones de México. Muchos extraterrestres están trabajando entre nosotros (nos dice).
Uno puede reencarnar sucesivamente en otros seres humanos o animales. Para liberarse totalmente de la materia y alcanzar la perfección en el "Todo" se necesitan muchas reencarnaciones. Sin embargo, hoy día, los gnósticos están defendiendo más las ideas de las reencarnaciones progresivas.
En su libro "Más allá de la Muerte", Samael Aun Weor informa a sus seguidores que hay que reencarnar 108 veces, pero los malos, después de la muerte deben pasar por una "segunda muerte" y entonces vuelven a este mundo, evolucionando primero como elementos minerales, ascendiendo después al estado vegetal, luego se reincorporan en organismos animales y más tarde reconquistan el estado humano que otrora perdieron, y al llegar a estas alturas se les asigna nuevamente 108 vidas. Si fracasan otra vez, vuelven a repetir el mismo proceso. Según el gnosticismo para obtener la conciencia hay que reencarnar de 1 a 8 veces.
Es oportuno ver como de la Biblia podemos extraer un pasaje que contradice totalmente lo profesado por Samael : "Así también en la resurrección de los muertos (...) Se siembra cuerpo animal, resucitará cuerpo espiritual". (Corintios 15:42-44).
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